Glaucoma

SIN Esperas, SIN Dudas, SIN Sorpresas.
SIN Esperas, SIN Dudas, SIN Sorpresas.
Solicita información
Hidden
Este campo es un campo de validación y debe quedar sin cambios.

¿Qué es el glaucoma?

Aunque el glaucoma es la segunda causa de ceguera en el mundo, casi la mitad de las personas que lo padecen no lo saben, suponiendo esto un peligro para su salud ocular pues la enfermedad no tiene cura, pero sí tratamiento si esta se coge a tiempo.

El glaucoma es una enfermedad ocasiona un deterioro irreversible en el campo visual producido por un incremento de la tensión ocular. La tensión ocular elevada dificulta el riego del nervio óptico, propiciando la pérdida de su funcionalidad y con ello, la capacidad de ver. Como el daño que produce el glaucoma es neurológico, actualmente no existe ninguna forma de revertir los daños ocasionados por este, algo que aumenta la gravedad de la afección.

Es importante destacar que la aparición del glaucoma puede darse en cualquier persona y, aunque suele ser más común en las personas mayores de 45 años (glaucoma de ángulo abierto), también puede aparecer en bebés (glaucoma congénito) y adolescentes (glaucoma raro).

En el caso del glaucoma de ángulo abierto, debemos puntualizar que no responde a factores externos ni muestra síntomas, no pudiendo evitarse y conduciendo a la ceguera total con la esperanza de vida actual. Por este motivo, es importante someterse a una revisión oftalmológica anual a fin de identificar este tipo de dolencias a tiempo.

¿Cuáles son los síntomas?

El glaucoma es una afección silenciosa y progresiva que se ha ganado el título de «ladrona silenciosa de la visión». La principal característica de esta enfermedad ocular, como su propio nombre indica, es la imposibilidad de identificarla a través de revisiones médicas u ópticas, pues no presenta síntomas claros para su diagnóstico (dolor, molestias, ojos rojos, picor…). Aunque sea totalmente indolora, existe una variación de esta llamada glaucoma de ángulo cerrado agudo que puede llegar a producir fuertes dolores, nauseas, vómitos y la pérdida total del riego en el nervio óptico.

Por otro lado, en cuanto a las alteraciones que propicia el glaucoma en sus etapas más avanzadas, debemos decir que es una enfermedad que produce una pérdida paulatina del campo visual lateral (en muy pocos casos el campo visual central) no reversible ni tratable mediante gafas o lentillas.

Como consejo, desde el equipo de nuestra clínica oftalmológica en Murcia recordamos que las revisiones médicas y ópticas no pueden identificar el glaucoma. La única forma de diagnosticar este tipo de enfermedad es mediante la atención de un oftalmólogo profesional en las revisiones periódicas en las que se controla la presión intraocular y se realizan pruebas especiales como el análisis del campo visual con los más modernos escáneres del nervio óptico.

¿Qué tratamiento tiene el glaucoma?

Inicialmente, el tratamiento del glaucoma es médico, mediante la aplicación de diversos colirios.

Es imprescindible el estricto cumplimiento de la pauta que indique el oftalmólogo para garantizar que no habrá daños irreversibles.
Siguiendo las indicaciones, cumpliendo el tratamiento y llevando a cabo las revisiones que se recomiendan, el glaucoma se controla sin problemas. En algunos casos, si el tratamiento médico con colirios no controla la enfermedad, habrá que recurrir al tratamiento quirúrgico.

Para ciertos tipos de glaucoma, menos comunes, se puede precisar de cirugía desde un primer momento, o incluso la extracción de la catarata de modo conjunto.

En el caso del glaucoma agudo está indicado realizar un tratamiento con Láser YAG.

¿Sabías que es la segunda causa de ceguera en el mundo? ¿Sabías que no tiene cura, pero si se puede controlar?

El Doctor Alberto González-Costea nos habla de este problema en su intervención en Onda Cero por el Día Mundial del Glaucoma (12 de Marzo).

La principal característica del glaucoma es que no duele, no pica, ni se pone el ojo rojo… no tiene síntomas claros para diagnosticarlo, únicamente se va perdiendo paulatinamente el campo visual lateral, en muy pocos casos el campo visual central, por lo que la gente no llega a darse cuenta de esta pérdida de visión. Aunque no tenga cura, puede controlarse y ayudar a mantener la visión mediante tratamientos. Si queréis saber más sobre esta enfermedad, conocida como “el ladrón silencioso de la visión”, podéis escuchar su intervención en el siguiente audio.